La paradoja del agua

Pabellón
2024

Juan Carlos Cano
Pilar Echezarreta
Meir Lobaton
Rodrigo Trejo

Santiago Domenzain
Zarah González
Nelly Rodríguez
José María Zarroca
La propuesta para el Pabellón de México en la 19ª Bienal de Arquitectura de Venecia 2025 nace de la necesidad de materializar el volumen de agua perdido en la Ciudad de México, transformando una cifra abstracta en una experiencia tangible. El proyecto aborda la contradicción hidrológica de la Cuenca del Valle de México: una región con lluvias abundantes que enfrenta una escasez crónica de agua potable, agravada por un sistema de distribución que pierde 22,500 litros por segundo debido a fugas.

La instalación traduce esta crisis en una estructura compuesta por 95 tanques suspendidos. Treinta de ellos contienen arena, representando una abundancia ilusoria que se libera a lo largo de la exposición: un tanque por semana, hasta liberar un total de 22,5 m³, equivalente al agua que se pierde en un solo segundo en la red de la ciudad. Este acto convierte el espacio en un paisaje que se obstruye progresivamente, mostrando cómo el desperdicio sistemático compromete el entorno.

El proyecto genera una experiencia sensorial inmersiva, confrontando al visitante con las consecuencias tangibles de la paradoja hidrológica y evidenciando la ineficiencia institucional frente a un problema de magnitudes críticas.


En octubre de 2024 fui invitado por Meir Lobaton a formar parte del talentoso grupo. Formé un equipo de trabajo de estudiantes, quienes participamos del diseño conceptual de la instalación y produjimos la maqueta de estudio para la propuesta final. Todas las imágenes son propiedad de Taller L+L.
La paradoja del agua

Pabellón
2024
Juan Carlos Cano
Pilar Echezarreta
Meir Lobaton
Rodrigo Trejo

Santiago Domenzain
Zarah González
Nelly Rodríguez
José María Zarroca
La propuesta para el Pabellón de México en la 19ª Bienal de Arquitectura de Venecia 2025 nace de la necesidad de materializar el volumen de agua perdido en la Ciudad de México, transformando una cifra abstracta en una experiencia tangible. El proyecto aborda la contradicción hidrológica de la Cuenca del Valle de México: una región con lluvias abundantes que enfrenta una escasez crónica de agua potable, agravada por un sistema de distribución que pierde 22,500 litros por segundo debido a fugas.

La instalación traduce esta crisis en una estructura compuesta por 95 tanques suspendidos. Treinta de ellos contienen arena, representando una abundancia ilusoria que se libera a lo largo de la exposición: un tanque por semana, hasta liberar un total de 22,5 m³, equivalente al agua que se pierde en un solo segundo en la red de la ciudad. Este acto convierte el espacio en un paisaje que se obstruye progresivamente, mostrando cómo el desperdicio sistemático compromete el entorno.

El proyecto genera una experiencia sensorial inmersiva, confrontando al visitante con las consecuencias tangibles de la paradoja hidrológica y evidenciando la ineficiencia institucional frente a un problema de magnitudes críticas.


En octubre de 2024 fui invitado por Meir Lobaton a formar parte del talentoso grupo. Formé un equipo de trabajo de estudiantes, quienes participamos del diseño conceptual de la instalación y produjimos la maqueta de estudio para la propuesta final. Todas las imágenes son propiedad de Taller L+L.